Entrada del blog por Ginamaria Roman-Echevarria
Resumen del artículo:
Los programas de reproducción en cautiverio para los animales se fundan con el propósito
de mantener la diversidad genética y salud delos individuos hasta la reintroducción al ecosistema.
Al pasar de los años se han observado varios éxitos en este tipo de programas, en donde se crían
especies en cautiverio y luego se reintroducen a su ecosistema con éxito. Ejemplos válidos son el
hurón de patas negras (Mustela Nigripes), nativo a América del Norte Central, el cóndor de
California (Gymnogyps Californianus), el pájaro más grande en tierra norte americana, y el
Caballo Przewalski (Equus Przewalski), nativo a Asia central. Sin embargo, se puede considerar
que una tercia parte de las reintroducciones al ecosistema no son exitosas. Esto es debido
primordialmente a la mala calidad de hábitat que el ser humano le provee a estas especies, así
sean zoológicos muy pequeños o laboratorios y aunque este sea un factor inmenso en el fracaso
de la reintroducción, también se pueden considerar los comportamientos alterados, así sean
rituales de cortejo, rutinas de caza, selección de anidación o todos. Al igual que una diversidad
genética empobrecida, factor que es primordial para un buen programa de reproducción en
cautiverio. Un ejemplo de una práctica errónea de la reproducción en cautiverio es el antílope,
que en su naturaleza este tiene unas características y comportamientos que lo ayudan a
defenderse de depredadores y cuando este es criado en cautiverio se puede volver sumiso, y
como efecto, al introducirlo al ecosistema, pierde su capacidad de protegerse y fracasa la
supervivencia.
La retención de la diversidad genética es importante para el potencial de una población a
largo plazo. Por esto la pérdida en diversidad genética está directamente asociada al incremento
en el riesgo de extinción de una población, la misma es representada usualmente por la
heterocigosidad y la diversidad alélica de la especie. La reproducción en cautiverio no tiene
efecto directo en la diversidad alélica, pero reduce directamente la heterocigosidad al aumentar la
proporción de homozigotes relativa a expectativas al azar. Poblaciones con un tamaño efectivo
de población (N e ; provee un marco matemático que puede predecir la velocidad a la que se pierde
la diversidad genética) pequeño tiene mayor posibilidades de perder diversidad genética que
aquellos con un N e grande. Ya que la mayor parte de los programas de reproducción en
cautiverio son de poblaciones pequeñas con una diversidad genética limitada, mayormente
debido a la limitación de espacio que se provee, se trabaja con la media de parentesco para
mantener N e lo mas grande posible. Esta media de parentesco representa un valor numérico de la
singularidad genómica de un individuo en una población, basado en ascendencia. La misma es
probabilidad de que un alelo muestreado de un individuo sea idéntico por descendencia con un
alelo, en ese locus en particular, muestreado al azar de la población. Un parentesco alto en una
población significa una diversidad genética menor, por ende al escoger un organismo de una
población con un parentesco bajo aumenta la posibilidad de una reproducción en cautiverio con
mas eficiencia. Como la diversidad genética es de tanta relevancia en este estudio, el impacto en
los programas de reproducción en cautiverio es de mucho interés.